NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Con orgullo, casta y robados

Lo primero, felicitar al Atleti. Lo segundo, mi admiración a su afición. No he visto algo así desde una tarde de Champions en Glasgow: el Valencia ganaba 0-3 al descanso y, al regreso de los jugadores, su afición coreaba el nombre de su equipo, como si ganara 3-0. El Calderón es un jugador más del Atleti. En Mestalla se debe tomar nota muy seriamente de eso. Lo tercero, el robo de Florian Meyer al Valencia. Hasta el Calderón se quedó mudo pues sabía que habían atracado a los che. Dos penaltis clarísimos: mano de Domínguez en la primera parte y agarrón de camiseta a Zigic con rotura de ella, que sólo vieron dos: todos los vivos y todos los muertos, menos el árbitro y el ciego del juez de área.

El Atletico mereció ganar hasta el 75', en que el Valencia, a la desesperada, con valentía y mantequilla en su defensa, se decidió a hacer internacional a De Gea. Qué crack él y César. El Valencia cae con orgullo, casta y honor. El único alivio para los valencianistas. Si Meyer tuviera dignidad, se iría a pitar solteros contra casados.