Forlán siempre cumple
Forlán se equivocó con sus improperios a la grada el día del Athletic. Lo sabe. La afición es consciente de su arrepentimiento y ya le ha concedido el perdón. Quique le hizo el quite cuando le cambió el domingo ante el Deportivo. El uruguayo, que suele retirarse con la cabeza gacha cuando es sustituido, esta vez lo hizo con ella erguida. Más aún, mientras devolvía con aplausos la ovación del público, giró el cuello hacia el fondo norte, al que había insultado, disculpándose.
El uruguayo es un ídolo en el Calderón. Y estuvo bien que afición y jugador hicieran las paces. Apenas había razones para discrepar. Forlán, que da la impresión de estar este año más castigado físicamente, está en sus números. La pasada campaña llevaba, a estas alturas, un gol más que en ésta: 23 por 22, bien es verdad que en Liga había hecho cuatro más (20 por 16 ). Dieciséis tantos en Liga, uno en Champions, dos en Europa League y tres en Copa del Rey son sus cifras de la 2009-10, por los 20 en Liga, dos en Champions y uno en Copa de la 2008-09 entonces. La diferencia estuvo en su espléndido final en la 2009: doce goles en los últimos ocho partidos de Liga, que le valieron la Bota de Oro. Forlán siempre cumple. Y Kun también. Que sigan los dos en el Atlético muchos años.