Éste es otro Sporting

Después de la mala imagen que el Sporting dio en Almería, los rojiblancos, técnico y jugadores, tenían una deuda pendiente con una sensacional afición, que los recibió como si nada hubiera pasado. Los chavales de Preciado cancelaron el débito con una buena actuación ante un rival de alto nivel, que demostró que esta Liga tiene tres peldaños. El Valencia no pertenece al grupo del Sporting, si bien la figura de Juan Pablo tuvo una repercusión especial, sobre todo en el primer tiempo, cuando desesperó a los Villa, Mata, Silva y compañía.

El empate es un buen resultado para un Sporting que se había atascado en las últimas jornadas y que se vio envuelto en una onda de pesimismo después de la derrota de Almería. La principal lectura del primer punto de la segunda vuelta tiene como interpretación que este equipo tiene fundamentos para pensar en que se puede lograr la permanencia sin tener que esperar a la última jornada y sin necesidad de pasar apuros. La imagen ofrecida ante el Valencia devolvió las esperanzas, aunque, por otro lado, reitera el empecinamiento del cuadro técnico para no haber traído en el mercado de invierno otro delantero. De momento, el punto es para celebrarlo.