Soler: sus cafés, su torre y su vacilada
Se me vuelven pegajosas las teclas al escribir de Soler. En su día se pegó la vacilada de anunciar a bombo y platillo que "él personalmente garantizaba el precio mínimo de venta de la parcela de Mestalla en 360 millones y la construcción del Nuevo Estadio". Y como ejemplo, compró una cuarta parte del solar por 90. De ellos pagó 13,5 y no tenía obligación de pagar más hasta que se reparcelara. Sin embargo su propia gestión ruinosa le obligó a anticipar otros 26. El club los descontó antes de vencimiento. Ahora Soler, igual que ha hecho con el Valencia, ha arruinado su propia empresa y ya no está papá para ponerle las andaderas. El VCF ha tenido que devolverle los 13,5 y hacerse cargo de los 26 para recuperar la parcela. Espero que ya nadie diga que Soler ha puesto dinero en el club.
Porque lo que pagó y perdió por sus acciones lo puso en bolsillos privados; no en la caja del club. Ni los cafés esos con los que fichaba a Cristiano Ronaldo. Se han pegado unas comilonas de infarto y se han dado unos lujos asiáticos, porque el señorito tenía delirios de grandeza. Ahora el VCF cava más honda su fosa. Desde ayer debe 39,5 millones de euros más. Y Bancaja (y Banco Valencia) ya tienen prestados 280. Que el VCF siga evitando la suspensión de pagos es un milagro, por la respiración asistida de la Generalitat y Bancaja. Y todavía hay que sacar 180 millones más para terminar el campo nuevo. A ver quién le pone el cascabel al gato. Supongo que a Juan Soler le dará vergüenza salir a la calle. Y a sus propagandistas y apoyos, también. O no... porque no tienen vergüenza.