'UP': ¡La aventura nos espera!
Por si todavía no saben qué regalarse en estas señaladas fechas que se nos avecinan, permitanme una sugerencia: háganse con UP. El cómo queda a su elección. Para los que, como dibujaba el otro día El Roto, no se encuentren entre los que quieren que toda creación artística sea gratis porque, en el fondo, creen que no vale nada, acaba de llegar a las tiendas el DVD de esta película creada por Disney y los genios de Pixar, que este año han recibido un León de Oro especial a toda su carrera, concedido por el Festival de Cine de Venecia.
Una historia de dibujos animados iluminadora para los niños; pero aún más para los mayores, pues es toda una alegoría de los mejores valores: la solidaridad, el trabajo en equipo, o la conservación de la naturaleza y, por supuesto, a saber enfrentar la adversidad plantando cara a los poderosos que pretenden arrasar nuestra vida. Es una llamada a vivir la aventura con mayúsculas, (desde el nombre del dirigible "el espíritu de la aventura") y a embarcarse en busca de un paraíso perdido, que en este caso se encuentra en el corazón de la Venezuela amazónica. Allí donde se levantan los asombrosos tepuis, unas formaciones rocosas gigantescas, cortadas a pico, que se elevan cientos de metros sobre la selva. En uno de ellos se encuentra El salto Ángel, la cascada más alta del mundo así bautizada en honor del primer piloto, el estadounidense Jimmy Angel, que logró, en 1937, aterrizar -eso sí, empotrando la avioneta en el suelo- sobre la meseta que corona el tepuy, desde donde se despeña el agua 970 metros acantilado abajo. En esa misma cascada fallecería en 1990 Jean Marc Boivin, un magnífico escalador francés, intentando realizar un salto base con un paracaídas. Hacia ese lugar mágico y mítico se dirige el bueno de Carl, animado por la voluntad de vivir por fin el sueño que llevaba posponiendo desde su infancia y que había imaginado junto a su mujer
Y hasta aquí puedo contar para no chafarles el placer de disfrutar de esta película a pleno corazón. Cuando lleguen los títulos de crédito habrán descubierto que el espíritu de aventura no es privativo de seres excepcionales, sino que forma parte de algo mucho más esencial para nuestra existencia, que es la necesidad de vivir emociones intensas. "¡La aventura nos espera!"es la frase que retumba en toda la película. Una llamada a cada uno de nosotros. Ya sé que son malos tiempos y también que soy un ingenuo que, a pesar de todo lo que se me ha caído encima, aún cree en la bondad y en la solidaridad de la gente común, esa que viaja en el metro quitándose las angustias leyendo la victoria de su equipo favorito, pero ojalá la aventura siempre guíe nuestro corazón y nuestras cabezas para afrontar la existencia con incertidumbre pero con coraje, dejando el miedo a los poderosos abandonado en el suelo.