Regresa el '8' de los felices 80

Regresa el '8' de los felices 80

Míchel se niega a ser el verdugo de Pellegrini, pero si todo sale como tiene planificado no le quedará otra. Vuelve a su casa uno de los iconos de la Quinta de Buitre. Un tipo que caló hondo en la afición, pero que tuvo que irse por la puerta de atrás porque Capello no entendió el profundo significado que su figura tenía para el Bernabéu. Míchel tuvo que despedirse ante el Mérida con un homenaje improvisado por esa grada que sí supo entender ese espíritu rebelde que lo convirtió en un futbolista especial. Su beso al césped sagrado del Bernabéu fue compartido por ese madridismo que está cansado de comprar globos que se pinchan con el resoplido de una hormiga

Pellegrini estará a seis metros a la izquierda del 8 de los años 80 (ahora lo lleva Kaká). El chileno no debe obcecarse. Morir con sus ideas sería absurdo. Rectificar es de sabios, ya que habla de Aragonés. Ánimo y suerte, míster.