Un ridículo afortunado
Cortito y al pie: al Atlético no se le puede escapar un entrenador que no sea del nivel de Benítez, Mourinho o similar. Mucho menos uno en paro y cuyo currículum lo forman Brondby, Getafe y Spartak. El no de Laudrup, al que atraía más un Villarreal en descenso, es la prueba evidente del actual desprestigio del Atleti, un club al que antes cualquier técnico soñaba con dirigir y al que ahora rechazan hasta los que están empezando.
Dicho todo esto, creo que el Atleti ha tenido suerte, porque me gustaría que Cerezo y Pitarch me explicaran por qué pensaban que el idóneo para coger un equipo con una defensa infame y un vestuario problemático era un técnico especialista en ataque y al que se le sublevó medio Getafe. En fin. un ridículo que aún ha de vivir más capítulos, como el del sentenciado Abel dando hoy rueda de prensa de prepartido sabiendo que es pasado. Un mal chiste.