Juguemos hoy a ser dueños del Xerez...
Les propongo un juego, ser dueños del Xerez por un día. A bote pronto, el club tiene embargadas las cuentas por un impago a Hacienda que según dicen rondaría los 12 millones, a los que se sumarían otros dos de la Seguridad Social. Al Ayuntamiento se le deben 2,2 a devolver en plazos anuales y a nombre de Joaquín Morales, lo dice él, rezan otros 4,5. Suyos son. Sumemos los 1,8 que prestó Francisco Garrido para saldar las deudas de la plantilla en su día y finalmente los 3 de prima por el ascenso a la plantilla (esta partida sería la primera en desaparecer si se acogen a la Ley Concursal). Sumando, la cifra total ascendería a 25,5. Aún debe haber algo pendiente por ahí. No sé si dineros prestados por otros o algo así... Pongamos que se llegaría hasta casi 29.
Y con este panorama llega STX y nos hace su oferta. Oferta muy esclarecedora, sobre todo según cómo respondamos. Nos instan eso sí a acogernos a la Ley Concursal, tesis avalada por el mesurado Antonio Millán, y eso nos pemitiría sanear el club e irnos sin hacer ruido. Pero para ello hay que entregar el libro de cuentas al juez, airear unas cuentas probablemente incómodas para ex presidentes o gentes de ocupaciones diversas. Si decimos NO la gente podrá pensar que nos quedamos porque escondemos algo o incluso porque otros no nos dejan irnos. Pero si decimos que SÍ, daríamos el primer paso para sacar del ruinoso oscurantismo a la economía del Xerez. Decidamos. ¿Que harían si fueran el dueño del Xerez? Le toca el turno de Morales. Y no es un juego.