Massa hace bien dándole tiempo al tiempo

Una alegría ver de nuevo a Felipe Massa subido en un monoplaza de Fórmula 1. En Hungría se llegó a temer por su vida y por su carrera deportiva, pero ahora ha demostrado que vuelve a estar en condiciones de manejar un aparato que es casi un misil sobre ruedas. Sin embargo, la impresión que me queda es que el brasileño no está tan en forma como nos quieren hacer creer. Quiero decir que una cosa es hacer una vida normal, entrenarse con un kart y dar una vueltas con un Ferrari, y otra bien diferente someterse a la tensión extrema de la competición, al esfuerzo de una carrera completa. No me creo eso de que esté preparado no para hacer un gran premio, sino dos... porque entonces me parece que los haría.

Hace bien, además, en tomarse las cosas con tranquilidad, dándole tiempo al tiempo. Poco ganaría plantándose en la parrilla de Abu Dhabi. Y, sin embargo, cualquier precipitación podría transformarse en un paso atrás, cuando lo que Felipe necesita ahora es ir hacia adelante. Tiene cinco meses más para ponerse a punto, para convencerse de que, como dice, realmente es el mismo de antes. Lo importante es que llegue al cien por cien a la primera cita de Bahrain, en un año en el que, además, la exigencia para él puede ser aún mayor: el veterano de la Scuderia, un nuevo compañero de equipo, otros desafíos, puede que más presión... Así que cada cosa a su tiempo. Sin prisas pero sin pausas, aunque siempre con garantías.