Un culpable y demasiados cómplices

Hoy se conocerá si hay o no oferta de STX Global Services por el Xerez. Les diré que Fernando Rodríguez quiere hacerla, pero sus asesores jurídicos no se lo recomiendan. No los financieros ni los deportivos, los JURÍDICOS. Las cuentas del Xerez son peor que la caja de Pandora. El día que se abran saldrá a la luz la herencia presidencial de Pacheco, Oliver, Gil Silgado y Morales. El de Dos Hermanas, que heredó una manzana podrida, no tiene culpa de todo, pero sí de lo ocurrido durante su estancia y de no haber arreglado lo que heredó. No supo, no quiso o tal vez no debía. Presume de poner dinero en el club, pero no le ha ido mal en Jerez como empresario. Y aunque dice que subió a Primera al Xerez, no se engañen, si Garrido no paga en la LFP...

El Convenio de Chapín y la Ley Concursal son cortinas de humo. En lo primero, gran empeño de Osma (mejor portero que presidente), la ley no permite ceder el campo al Ayuntamiento sin tener los pagos al día. Y la Concursal sin auditoría, agua. La situación es de colapso jurídico (pregunten a STX) y de quiebra técnica virtual. Llegar a 30 millones de deuda es cuestión de tiempo. Y todo ocurre con la connivencia de unos accionistas que no exigen las cuentas, y dejan a las directivas campar a sus anchas, y de una parte colaboracionista de la Prensa que mira a otra parte. Si el Xerez baja, la opción de desaparición es real. Entonces se buscarán culpables. Uno, Morales, a quien debe aterrorizar pasar a la historia por presidir la desaparición. Y suya no sería toda la culpa, pero...