El ciclismo nos mete en líos

El ciclismo nos mete en líos

Valverde tiene todo el derecho a correr los Mundiales; también a dormir en Italia, aunque los Mundiales sean en Suiza. La Federación Española de Ciclismo está convencida de que nada tiene que temer ni ocultar y actúa con plena normalidad. Como si nada sucediera, como si en el extranjero no nos miraran con recelo. Pues hace mal, porque en estos tiempos que se comienza a combatir el dopaje con absoluta firmeza conviene aplicar lo de la mujer del César. Si nosotros vamos por ahí ignorando que la propia Unión Ciclista Internacional (UCI), organizadora de los Mundiales, quiere hacer extensiva a todo su ámbito la sanción de dos años que pesa sobre Valverde en Italia y que éste tiene abierto un proceso penal en dicho país, mal vamos.

La cosa no está como para ir por ahí con toda normalidad. Por lo pronto la UCI trata de vetar a Valverde y al dormir éste en Italia los carabinieri pueden presentarse a tomarle declaración en cualquier momento. En Italia, por cierto, son muy dados a montar un espectáculo en temas de dopaje, entre otras cosas para que sirvan de aviso para navegantes. Todo lo contrario que aquí. Sólo este año se han producido doce casos en el ciclismo como para que la Policía interviniera, ahora que aquí también el dopaje es delito, pero no tenemos noticias de ello. ¡Qué van a pensar por ahí! Si encima nuestro ciclismo actúa como si nada pasara cuando hace cuatro días nos echaron para atrás a Héctor Guerra por dopaje. Es que no se entera.