Seis carreras para evitar el desastre

Seis carreras para evitar el desastre

Seis carreras, seis. Media docena de oportunidades para que Alonso no cierre la temporada sin subirse ni una vez siquiera al podio. De consumarse el desastre, sería el peor balance del asturiano desde que comenzó a malacostumbrarnos con sus magníficos resultados allá por 2003. Si de algo estoy seguro es de que Fernando lo va a seguir intentando con el mismo ánimo, pundonor y arrojo que cuando empezó este Mundial en Australia allá por el mes de marzo. Sin embargo, ya somos plenamente conscientes de que eso no es suficiente. Si la mecánica no acompaña, los esfuerzos del piloto pueden resultar baldíos, sobre todo ahora que las posiciones de cabeza se están vendiendo tan caras, con diferentes mínimas entre los candidatos a ellas.

N o tengo la más mínima intención de venirme abajo, aunque sí que reconozco que el objetivo es ambicioso tal y como están las cosas. Sin más evoluciones en el Renault, Alonso seguirá estando en una situación de cierta precariedad respecto a sus rivales. Ahora mismo creo que los Brawn, los Red Bull, los McLaren e incluso los Ferrari son mejores que los coches de la escudería francesa, lo que automáticamente nos lleva a la novena posición de partida. Claro que entre los de delante hay altibajos, pero es que tendremos que esperar al fallo de la mitad para empezar a aspirar al podio. No es imposible, desde luego, y eso es lo que me ilusiona, pero sin perder de vista la dificultad de la empresa. Así que confiemos en que el talento de Fernando ayude en el empeño.