La pretemporada, después del sobresalto inicial de los descartados, está transcurriendo bajo una tranquilidad necesaria en Isla Canela. Se espera hoy la llegada del presidente y su nuevo asesor, Irureta, que a buen seguro tendrá un intercambio de impresiones con Caparrós. Aunque han llegado fichajes, de momento los incorporados, a la espera del rendimiento de Díaz de Cerio, tampoco van a dar un salto de calidad importante a la plantilla. Llegan para complementar.

La clave de este año estará en el rendimiento defensivo del bloque, que ha dejado algunas lagunas al descubierto en el primer torneo del verano. También en que el técnico consiga meter en la rueda de oportunidades a más futbolistas que el año pasado, para que las piernas de los buenos estén más ligeras. Pero no nos vayamos a engañar, aquí el que marca las diferencias es Llorente. Habrá que jugar para él, sin obsesionarse, pero llegando a la línea de fondo para poner buenos centros. Susaeta se ha asomado con fuerza y es una gran noticia. Lo de Bóveda merece cautela, pero de verdad que ilusiona.