Aquí hay hambre de ciclismo

Ha sido una pena que Óscar Freire no lograra la victoria. En Barcelona ya ganó un cántabro en 1965 (Pérez Francés) y hubiera sido muy bonito que otro cántabro le sucediera. Pero los demás también corren y no ha podido ser. Nos quedamos en las puertas, con Freire, segundo, y Rojas, tercero. Ha sido una etapa muy bonita por la multitudinaria presencia de la afición catalana al borde de la ruta, a pesar de la lluvia. Se ve que tienen hambre de ciclismo. Inimaginable tanto público en una etapa de la Vuelta a España. No hay duda de que el Tour es la mejor carrera mundial. Y una etapa muy peligrosa por la cantidad de caídas que se han producido. Por suerte ninguno de los favoritos se ha visto implicado. Hubiera sido una pena perder a un corredor importante justo antes de la etapa pirenaica.

Llega la primera etapa de montaña y yo espero ver a Contador de amarillo al final de ella. Está claro que no le van a permitir atacar a Armstrong, porque, aunque Bruyneel siga mintiendo, es él el líder del equipo y no Alberto. Pero ya habrá otros que ataquen y Contador debe salir tras ellos y remachar, aunque Armstrong se quede atrás.