La ocasión para lucirse en el mundo

Irak tiene ante España una gran ocasión para mostrarse ante el mundo. En un país devastado por la guerra, aparece contrapronóstico un grupo de jugadores prácticamente aficionados. Sólo un futbolista, Hawar Mulla Mohammed, del Anorthosis chipriota que este año ha competido en la Liga de Campeones, conoce el fútbol europeo y su gran potencial. La otra estrella de Irak es Nashat Akram, que juega con el número 5 en honor al Zidane galáctico del Real Madrid, que ha sido recientemente fichado por el Twente holandés. El resto de los jugadores de Milutinovic nunca han estado tan cerca de ases como Torres, Villa, Casillas, Xavi o Puyol. La grandeza de estos fenómenos no hace sino aumentar el deseo de Irak de dar la campanada en Suráfrica.

Frente al optimismo desbocado de Irak, sólo su seleccionador, el experto Bora Milutinovic, parece conocer la realidad: no admite la derrota de antemano, pero fija sus esfuerzos en el partido contra Nueva Zelanda porque es ahí donde quiere apretar para jugarse la clasificación como segundo. Su gran experiencia frena un poco el ímpetu de sus futbolistas, entusiasmados ante el partido con la Roja. La ventaja de Irak es que no tiene nada que perder. Su sistema, defensivo a ultranza ante Suráfrica, podría sufrir una variación por ello. Quizás no voluntaria, porque Milunitovic no está loco, pero sí quizás sobrevenida por el espíritu de sus jugadores.

Ziad Bou Raad es libanés e informa para Irak desde la agencia France Press