Catorce días 'son molto longo'

Con su regreso, el hombre que recuperó los valores del gran Real Madrid de las cinco Copas de Europa va a romper una de las máximas de Don Santiago. La doctrina Bernabéu era bien clara: "El que se va, no vuelve". ¡Tararí! La revolución Florentino puede con todo, pero hay cosas que nunca cambiarán. El tiempo no perdona. Y si noventa minuti en el Bernabéu son molto longo, da miedo pensar qué puede pasar en un solo día. O en una semana: de domingo a domingo, la Casa Blanca ha sufrido terremotos que superan aquellos Siete días de mayo de John Frankenheimer, en los que Burt Lancaster estuvo a punto de dar un golpe de estado en Washington. Era una película, sí, pero ¿qué podría pasar en catorce días más sin Florentino?

El 25 de mayo de 1964, el Madrid viajó a Viena para medirse al Inter de Milán en la final de la Copa de Europa. Alfredo Di Stéfano era posiblemente el futbolista más poderoso del mundo, el más querido por la afición blanca. Catorce días más tarde, con cara de no saber muy bien por qué, la Saeta se fue a su casa tras su partido de homenaje, para no volver. La revolución, cuanto antes, por favor.