Negociar no es para Mosley

Negociar no es para Mosley

Negociar: tratar asuntos públicos o privados procurando su mejor logro. Lo dice la RAE. Más sencillo aún: hablando se entiende la gente. Lo voy a traducir todo al inglés, lo voy a empaquetar en un correo electrónico y se lo voy a enviar a Mister Mosley, presidente de la FIA. A ver si de ese modo se va aclarando un poco el hombre, porque anda más despistado que nunca... Eso de tomar decisiones de forma unilateral, sin contar con los protagonistas es algo que no me entra en la cabeza de ninguna manera, pero menos aún cuando se ha convertido en el talante habitual de la persona que, precisamente, debería encargarse de conciliar posiciones, de mediar en la búsqueda de ese interés común que ayude a conseguir los objetivos que se persiguen.

Me parece inaudito que se pretenda poner un límite presupuestario a las escuderías sin tener en cuenta su opinión, sus necesidades y exigencias. No digo que sus directrices deban ser inamovibles (aunque si alguien sabe cómo gestionar este campeonato deben ser ellas) pero desde luego que sí tenerlas muy en cuenta en las negociaciones, esa palabra que ya hemos descubierto no aparece en el léxico de Mosley. Porque sino pasa lo que pasa... Ya ocurrió con las dichosas medallas y ahora la historia se repite con el conflicto económico: que los equipos amenazan con marcharse si se impone una norma que ellos no comparten. Una herramienta de presión que dice mucho de la pésima gestión de este presidente de la FIA que ya aburre... al menos a mí.