Muy poco favorable para Alonso

Muy poco favorable para Alonso

Se cumplieron los pronósticos. Ya me parecía a mí raro que los equipos legales se hubieran puesto a trabajar en nuevos difusores si esperaban que la FIA les diera la razón. Y también que Brawn, el gran genio de la operación, hubiera desarrollado un monoplaza ganador corriendo el riesgo de verse descalificado, es decir, sin haber consultado cada paso que daba con la propia Federación Internacional. Y, de remate, que Williams y Toyota hubieran tomado sin fundamento una vía similar. El resultado aquí está: el planteamiento técnico de los más atrevidos es el correcto y los demás tendrán que ponerse las pilas para coger el tren sobre la marcha...

Lo peor del asunto es que intuyo que la decisión no beneficia para nada a los intereses de Fernando Alonso. El R29 no va tan bien como se esperaba y de remate Renault se enfrenta ahora al reto de adaptarlo a las nuevas especificaciones. Y como no es el equipo con más medios, puede verse en desventaja en una puesta al día que se antoja imprescindible para aquéllos que aspiren a algo en este Mundial. Pero bueno, es lo que hay, así que no queda otra que apretar los dientes, mirar hacia adelante y cruzar los dedos.