Si puede ser antes del Betis, mejor

Si puede ser antes del Betis, mejor

Los leones van a tener que realizar un fuerte ejercicio mental para no perder la perspectiva en los casi dos meses que restan hasta la final de Copa. Esperemos que no se tenga que hablar de otra cosa que del desembarco en Valencia y que el miedo a bajar sea simplemente pasajero. El gran objetivo es que en ese apasionante Athletic-Barcelona del 13 de mayo sólo se piense en ganar el trofeo, no en que cuatro días después hay un partido contra el Espanyol. ¿Se imaginan tener que aparcar la fiesta de la gabarra hasta la siguiente semana porque no se ha rematado aún la faena liguera? Sería una verdadera puñeta. Cuatro victorias, cuatro, son las que se necesitan. A poder ser, ante los rivales más necesitados, léase Osasuna, Numancia, Mallorca y Betis. Y si no, como mal menor, no perder contra ellos.

La meta es llegar salvados al gran día, pero si se puede tener ya el billete para Primera una jornada antes, miel sobre hojuelas. Así, Caparrós podría alinear a los suplentes en el encuentro en San Mamés ante su querido Betis. Evitaría riesgos de lesiones y rojas, también angustias en la grada. Sería una gran alegría previa, esperamos, a otra mayor. Así que, técnico, futbolistas y afición deben ponerse las pilas desde ya para que no nos pille el toro. Todo pasa por empezar dando un zarpazo en El Madrigal, que luego vienen Aduriz y un infierno en El Sadar. Que no cunda el pánico, pero tampoco que se relaje nadie. Hay ocho finales antes de la gran final. ¡A jugarlas a tope!