Juande no arriesgó lo que debía
El detalle táctico de poner a Lass de lateral derecho evidenció cierta precaución en Juande. Si a ello unimos que dejó en el banquillo a Higuaín para que Marcelo se desgastara en ayudar a Heinze, concluiremos que le venció el miedo. Vuelta a las andadas. El resultado por encima de todo, aunque haya que jugar en casa como un equipo pequeño. El marcador le castigó, aunque no tanto como merecía su tacañería.
Ni las diez victorias consecutivas le han hecho creer en su equipo. Sigue obsesionado con dejar la puerta a cero y tampoco supo ver las limitaciones defensivas de Heitinga y Antonio López. En el colmo de la prudencia, sacrificó a Guti cuando llegaron los cambios. El '14' no estaba teniendo su noche, pero era el único que no se obsesionaba en rifar balones para la media vuelta imposible de Raúl o Huntelaar. A Juande le vino grande su primer derbi. Y eso que había asegurado que sólo valía ganar.