Pepe, mejor fichaje de Calderón

Lleva semanas revoloteando el entorno de Cannavaro en busca de una renovación que, por edad y rendimiento, no se justifica. Pero la racha triunfadora del equipo y la confusión en las oficinas con el intruso Boluda al frente pueden beneficiarle. De ser así, yo que él le daría la mitad de la ficha a su compañero Pepe. Sin el portugués, en algunos partidos de diciembre, Cannavaro parecía un juguete roto. Con Pepe se asemeja mucho al campeón del mundo de 2006. También han desaparecido los marrones que se comía Ramos. Incluso Casillas vuelve a ser el de siempre. El regreso de Pepe tiene que ver con lo expuesto.

La historia recordará el mandato de Calderón por las chapuzas asamblearias, por el voto por correo, por el jeta de Nanín, por las dos Ligas, pero también por el fichaje de Pepe. Ya nadie discute su precio. Tampoco el escaso glamour que desprendía su nombre futbolístico. Me atrevería a decir que desde la retirada de Hierro nadie ocupó con tanta jerarquía esa posición en el Madrid. Ayer dio un nuevo recital. Igual se habla más de los paradones de Casillas, del gol de Raúl o de los quiebros de Robben, pero Pepe mantuvo al equipo cuando reculó en la segunda parte. Su velocidad y su anticipación son vitales.