Nuestro esfuerzo debe ser cada vez mayor

Tener el cargo de presidente de honor de la Fundación Atlético de Madrid es, ha sido y será una de las mayores responsabilidades en mi larga trayectoria rojiblanca y ya son más de 50 años unido a estos colores del Atleti. He podido vivir directamente momentos muy bonitos, pero también momentos especialmente difíciles, viendo como hay gente que no tiene nada, absolutamente nada. Nada para comer, nada para dormir, nada para vivir. O personas a las que la vida les ha dado la espalda por diferentes motivos, la mayoría de ellos sin merecerlo. Pero es gente que en ningún momento pierde la sonrisa y que siempre te transmiten una ilusión y una esperanza inenarrables. Te encuentras en una situación en la que son ellos los que te están transmitiendo su ánimo y su ilusión.

Es en esos momentos cuando te das cuenta de que tenemos una obligación con ellos, la de ayudarles, la de darles lo que puedas para que su vida sea un poco mejor. Hemos trabajado con la tercera edad, con inmigrantes, con grupos que, de una manera u otra, necesitan que alguien atienda sus problemas. O personas con enfermedades raras o de difícil curación, con discapacitados, colectivos que debemos atender, cuidar y apoyar. Como abuelo, sé lo importante que es la ilusión de los niños y por este motivo me siento especialmente orgulloso de este cargo. La Fundación ha volcado sus esfuerzos en los niños y niñas que se encuentran en una difícil situación. Ayudarles es una obligación y por este motivo nuestro esfuerzo tiene que ser cada vez mayor. Invito a todos a que participen con nosotros.