¿Evitando un catarro de Casillas?

Hacía mucho frío ayer en la capital, tanto que Juande consideró que Casillas estaba mejor a resguardo de las inclemencias meteorológicas en el banquillo. Es la única explicación que encuentro. La otra, la de rotar a los porteros según qué competición, ya caducó para el polaco en Copa. Mejor alimentar esta hipótesis que imaginar una posible duda sobre quién es el meta titular. Sea como fuere, a Iker no le debió hacer ninguna gracia ser el único señalado con respecto a los que perdieron ante al Sevilla. La decisión del nuevo técnico hay que interpretarla como poco oportuna.

Es cierto que Casillas no atraviesa por su mejor momento. También cantan los números, con un Madrid que está a la cola en la Liga en goles recibidos. Pero son tantos los problemas que asolan al grupo que fijarse en la portería resultaría ridículo. Para empezar, será complicado elegir a los cuatro o cinco defensas que resguarden al portero en el Camp Nou. Por lo visto frente al Zenit, no hay que descartar nada. ¿Salgado marcando a Messi en la izquierda? ¿Metzelder tapando a Henry por la derecha? No se hagan mala sangre, seguro que hay otras combinaciones. Lo de ayer quedará como el descanso para Iker pensando en Barcelona. Y punto.