Hamilton es un justo campeón
No es fácil encontrar un calificativo que defina lo que ha sucedido esta temporada. Yo creo que ha sido una buena campaña, con altibajos y errores que la emoción se ha encargado de camuflar, pero pese a todo ha sido un gran año. Todos los pilotos han sufrido, empezando por Alonso y acabando por Hamilton, sin olvidarnos de Massa, Kubica y del menos afortunado, Raikkonen. Todos se han equivocado en algún momento, pero el que menos lo ha hecho ha sido el inglés, o mejor dicho, ha sido un punto mejor que Massa y con eso vale: ha ganado el Mundial con 23 años y 35 carreras. Dos años en la F-1 y ya tiene un campeonato y un subcampeonato. Le duela a quien le duela y con todos sus defectos, Hamilton es un pedazo de piloto.
Lo que sí me parece negativo ha sido el sainete final, esa ridícula campaña en la que unos apoyaban a otros, atropellando los principios del fair play. Y cuando algo empieza mal, mal acaba. Resulta que era lícito que Alonso se prestase a colaborar con Massa, pero cuando Hamilton rebasó a Glock, que dudo muchísimo que se dejara pasar, era un escándalo. Es decir, que Alonso sí podía ayudar a Massa, pero Glock a Hamilton no. Un todo vale para fastidiar a Hamilton. Grotesco, aunque la última curva de Interlagos puso las cosas en su sitio.