A la victoria por vías diferentes
Una tarde-noche de fútbol de las que no se tenían que acabar nunca. Con la resaca del vendaval futbolístico del Barça todavía en la cabeza, sesión continua de tres partidos. De primer plato, el Liverpool de Benítez, los 'Benitles', se encaramaban en lo más alto de la Premier después de ganar al Chelsea en Stamford Bridge con un gol de un Xabi Alonso que volvió a tener una actuación perfecta. La segunda ración nos llegó desde Villarreal con ocho goles repartidos caprichosamente de dos en dos y la versión más intrínseca de un Atlético que fiel a su estilo de vida fue capaz de todo lo que hizo y más.
Y para acabar la jornada, un Madrid-Athletic pletórico, como los de antes, pero con arbitrajes de los de ahora. Es muy difícil pitar peor que Álvarez Izquierdo más allá de a quién masacró más con su carrusel de errores y equivocaciones. Curiosamente, el Madrid pudo golear y casi acabó pidiendo la hora. Su segunda parte entra dentro del terreno de lo notable, pero no le sirvió para que el Athletic se rindiera.
Tal y como transcurre la temporada, y aunque hay otros candidatos, va a ser inevitable que cada jornada se coloque al Madrid y al Barça en la balanza. ¿Quién juega mejor? ¿Quién es más contundente? De momento están empatados a puntos, pero es ya evidente y meridiano que sus conceptos futbolísticos son diferentes. Ambos tienen como denominador común el juego de ataque, pero su forma de llevarlo a la práctica es antagónica. Mientras el Barça mastica su juego con pases y circulaciones largas, el Madrid es mucho más perpendicular, sin renunciar a un juego combinativo más directo. Mientras el Barça presiona en campo contrario para recuperar cuanto antes el balón y siempre cerca del área rival, el Madrid se acuna en su campo en un repliegue que busca las salidas a la contra. El tiempo dirá qué estilo conduce al título.