Debemos mantener la calma
Es el momento de despedir al entrenador? Sinceramente creo que no. La situación no es tan calamitosa. Estamos prácticamente en octavos de final de la Champions, algo impensable hace unos años, y en la Liga aún estamos a tiempo de volver a engancharnos a los puestos de arriba. No perdamos la perspectiva, ni los nervios. Esto no ha hecho más que empezar. Estar entre los dieciséis mejores equipos de Europa, y no digamos entre los ocho, es lo mismo que decir que el principal objetivo de la temporada, volver a la élite europea, se ha cumplido. En el campeonato liguero, es cierto que a las primeras de cambio ha quedado claro que hay equipos más completos y mucho más compactos que el nuestro y que aún estamos muy verdes para ganar el título, pero hay que tener en cuenta que este equipo está aún por hacerse. Lo mejor está aún por llegar.
Han sido muchas las incorporaciones y es necesario un tiempo para ajustar el bloque. Tampoco las lesiones nos han favorecido. Ahora bien, tampoco ha pasado inadvertida la incapacidad del entrenador para dotar al equipo de un esquema definido. No se puede decidir una alineación dependiendo del rival. Tampoco ha demostrado Aguirre tener grandes dotes de psicólogo. Y es que no se puede entender la falta de concentración de la plantilla en los primeros minutos de encuentros tan decisivos como los disputados ante el Barça y el Madrid. Aguirre debe reflexionar y aprender de los errores. Despedirle sólo crearía inestabilidad y desconcierto.