UEFA, donde pierde hasta quien gana
Sin ánimo de menospreciar una competición europea, jugar la UEFA es un papelón. Me explico. Valencia y Sevilla, creados a base de talonario para ir a la Champions, sólo ganarían prestigio y dinero, algo, en caso de estar el 20 de mayo en Estambul. Todo lo demás supone disgustos, menoscabará su autoestima y aligerará sus arcas con viajes a Funchal o destinos más turísticos que futbolísticos como Salzburgo.
Miremos ahora desde la óptica de Racing y Deportivo. Para los cántabros, la efeméride, debut en Europa, la justifica. Broche de oro a su historia que podría tornarse en bajonazo a su tesorería (Finlandia está lejísimos) y probablemente a su físico, lo que podría pasarle factura en Liga. El Depor, grande con fatiguitas, la entiende como una terapia de grupo. Pero si fuera por Lendoiro la próxima ronda la jugaban en El Sardinero, viaje baratito. En resumen, quien pierda, queda mal en el campo y fuera. ¿O quizás gane, ahorrando dinero y energías? No cuestiono que salgan a ganar, me pregunto qué ganan. Y todo porque Platini, sulibellado por la Champions, arrumbó a la entrañable UEFA.