Durante este fin de semana un piloto español, Jaime Alguersuari, ha probado un Red Bull en el circuito tarraconense de Idiada. Puede que a muchos les parezca una noticia sin más trascendencia, ya que antes también lo hicieron otros pilotos como Jordi Gené (Benetton); Antonio García (Minardi); Oriol Serviá (Prost); Borja García (Toyota); Andy Soucek (Toyota); Adrián Vallés (Spyker); Javier Villa (BMW) o Roldán Rodríguez (Minardi y Force India), aunque finalmente ninguno logró disputar el Mundial. Pero si mi olfato no me falla, el destino de Jaime va a ser muy diferente al de sus ocho predecesores, este chaval apesta a Fórmula 1.

Tras subirse al RB4 se ha convertido en el piloto más joven de la historia de la F-1 en conducir un monoplaza (18 años, un mes y 10 días) y éste no es ni será su único récord para la historia, me consta que también tiene otros seis o siete de precocidad en ganar carreras en las categorías inferiores del automovilismo de diferentes países. Jaime, además, lleva tres años dentro del programa de jóvenes talentos de Red Bull, disputa el británico de F-3, en el que ya ha ganado una carrera y se encuentra a un punto de los líderes (Stewart, Piquet, Fittipaldi, Senna y Hakkinen, que suman trece títulos de F-1, ya lo ganaron), y el pasado fin de semana se estrenó en el Nacional de F-3 con victoria incluida. No sé si será como Alonso, ojalá, pero mientras tanto con semejante palmarés bien merece la pena que le sigamos la pista. Los de Red Bull, que de esto saben, ya lo tienen muy claro.