Campeón de juego... y de resistencia

Surgen tantas ideas de esta Copa que es difícil hilvanarlas, así que las desparramo una a una. Y ustedes se quedan con las que les apetezca. No sólo se compite en calidad, en talento; también en pura resistencia física. Consciente de ello, el Madrid dosificó sus fuerzas ante el Akasvayu. Lo justito para ganar. Cuando se tiene un bombero como Bullock se puede jugar con fuego. Felipe (Reyes) contra Marc (Gasol). Amigos y compañeros de Selección, pero salieron los codos a relucir. Cuatro años de diferencia entre ellos, pero el mismo coraje y espíritu ganador. Corazón guerrero también en Axel Hervelle, que no ha querido rendirse a la faringitis. Disfrutemos de su juego antes de que salte también a la NBA. George Karl, desde Denver, ya le tiene listo el contrato.

Madrid contra Joventut en semis. La ACB nos engaña diciendo que se han enfrentado siete veces en la Copa, con seis victorias blancas. No hagan caso. Madrid-Penya es la batalla más clásica en la historia del torneo (que nació en 1933, no en 1984). Un simple dato para demostrarlo: Real y Joventut han disputado 16 finales de Copa (10-6 de balance para los madridistas). Esta vez no hay título por medio, pero sí el acceso a la final. Será una lucha cruenta. Y, para el que gane, quizá una victoria pírrica, porque un día después puede abonar factura. En la otra semifinal, el Tau, como ayer el Madrid, intentará imponer sus galones. Pero el Iurbentia ya le ganó a domicilio en la Liga. Le ha perdido el respeto. Y siendo de Bilbao, cualquier cosa menos miedo.