Hay que cabrear a Schuster

Querían darle la razón a su entrenador y buscaron el set en blanco. Pero por la contundencia, imitaban más a Nadal que a Federer. Al margen de chascarrillos, el Madrid se acordó de jugar bien justo el día que más cuestionado estaba pese a ser líder, y todo por culpa del avinagramiento de un técnico al que le ofenden las críticas y le molestan los elogios. Es rarito, aunque él lo justifica por su condición de alemán. Para no echar agua al vino, apuntaremos que se recuperó la brillantez de Villarreal y dejaremos en un segundo plano la jaimitada del presidente del Valencia y el suicidio que propuso el debutante Fernández.

De lo que sí es responsable Schuster es de reforzar anoche el centro del campo para desahogar a Guti. Por fin empieza a asomar el Gago que nos habían vendido la pasada Navidad. También hay que reconocerle su apuesta por Raúl y Van Nistelrooy desde que comenzó la temporada. Ayer le volvieron a responder con goles y esfuerzo. Y lo es de que Ramos empiece a tener galones de líder. Vamos, que pese a su arrogancia, algo sabe de fútbol, no como los torpes periodistas que opinamos sin tener pajolera idea. Ahora falta que la tranquilidad que demostró su equipo para manejar un partido fácil, la tenga él en la sala de prensa.