El Kun se vistió de Romario
El Kun se puso el traje de Romario en el primer gol. Una genialidad. Todos sus movimientos recordaron al crack brasileño. Y definió con su misma frialdad, sin alterarse, un matador. Este chico es de la casta de los grandes goleadores, de los depredadores del área. Cuando arranca con el balón controlado, sólo se le puede parar con faltas, porque se pega el balón a la bota y tiene una potencia en las piernas descomunal. A veces intenta lo imposible, porque está convencido de que lo puede conseguir, estamos ante un genio del fútbol, un tipo que puede inventar en el momento más complicado para resolver un partido. Anoche abrió el camino de la victoria después de hacerle un lío a la defensa del Athletic. San Mamés se ha convertido en su campo favorito. Allí ya la montó la temporada. Pero entonces no estaba como ahora. El Kun ha necesitado un año para adaptarse pero ya está aquí. Yel Atlético tiene ahora un plan: encontrar al Kun. Anoche, cada vez que el centro del campo conseguía conectar con él, a los leones se les aflojaban las piernas. Fue un peligro constante en el primer tiempo. Después el equipo perdió el balón y sólo apareció a ráfagas, fogonazos deslumbrantes, eso sí. El Kun, además, ha encontrado a su socio ideal en la delantera: Forlán. Hace un año, el Kun y Torres eran agua y aceite, no mezclaban. El Kun y Forlán, en cambio, forman una pareja casi perfecta. Se compenetran. Y el Atlético tiene una pegada tremenda. Y eso le bastó para tumbar al Athletic.