No les pareció este Real Madrid una imagen similar pero mejorada de la del año pasado, incluyendo el gol habitual de Van Nistelrooy? Al holandés le faltan horas de vuelo pero apareció donde siempre: fuera de casa. Cannavaro está mejor, como Raúl, y no hay muchos cambios en la alineación. Aun así no es un equipo que domine, que imponga su juego. Espera atrás, presiona agazapado y, al robar el balón, se lanza con velocidad. Cuando contraataca lo hace con gente de calidad y con más hombres, así que hará sufrir al alto porcentaje de equipos españoles que está hecho a partir de la posesión. En Cataluña, por ejemplo, la prensa deberá cambiar de discurso: hay que contar con los de Schuster.

Pero a lo que íbamos: ¿no les suena este Madrid? Es el que dejó Capello medio hecho. De repente, tiene sentido que la transición post-Capello se le haya dado a un técnico que hizo carrera con equipos que contraatacaban y que funcionaban contra un Villarreal o un Barcelona: Schuster ganó a ambos con el Geta. No se queja nadie, es una apreciación: el madridista sonreirá viendo hoy la clasificación y repasando mentalmente lo que se dijo del equipo hace sólo 15 días.