Del blanco al arco iris
Doce jugadores, ocho equipos de procedencia. La Selección española destaca por su cohesión y buen rollito, pero no hay ninguna camiseta de club dominante. Unicaja destaca con tres representantes (Cabezas, Berni, Jiménez) y después están Real Madrid y Toronto Raptors, ambos con dos. Hubo un tiempo en que la mitad o más de la Selección española eran jugadores madridistas. Lógico, porque el Real sobresalía en España y Europa. Pero era un monarca en el desierto, sin competencia interior. Por eso las conquistas del equipo nacional llegaban a cuentagotas. El secreto de los éxitos actuales es que otros clubes españoles han seguido la ruta marcada por el Madrid y han alcanzado cumbre en Europa. La Selección es un río caudaloso con muchos y poderosos afluentes.