Pavoni, claridad meridiana

Reconozco que me sorprendió Pavoni cuando el pasado lunes comentaba a Ignacio de la Varga en la SER que querría marcharse del Cádiz si al final, no entra en los planes del técnico la próxima temporada. Se puede decir más alto pero no más claro. En AS el italo-argentino reconocía que se nota cierta inquietud por el futuro de la entidad. En definitiva, que los dos años de contrato que aún le restan al media punta cadista están el aire. Sin entrar en las razones que el futbolista argumente para hablar con tanta nitidez, que las tendrá sin duda, pienso que estamos ante un profesional íntegro. Pavoni llegó al club gaditano hace cinco temporadas. Ha demostrado una calidad impresionante -qué pena las lesiones sufridas- y en lo personal , junto a su esposa, decidieron que su hija naciera en la Tacita. Es obvio, el futbolista se siente querido en Cádiz pero sus aspiraciones deportivas van más allá que 'suplente de lujo'.

En lo deportivo entiendo que la sombra de Lobos le haya dañado. Sin embargo, pienso tras años de fútbol, que la presencia de ambos no es incompatible, y aunque no me gusta entrar en terreno técnico, ya les vimos actuar juntos. Distinto es la incertidumbre que despierta el futuro del club. De momento, Muñoz no vende, pero los futbolistas andan moscas. Quizá sea el motivo con más argumentos para hablar de la forma que lo hizo Pavoni. Cuando un profesional está pensando en qué pasará... malo, o si no, que se lo pregunten a los trabajadores de Delphi.