Maxi puede espolear al equipo
Lástima que las inoportunas lesiones nos hayan impedido sacar mayor fruto de su inconmensurable contribución al bloque. Maxi es, de largo, el mejor fichaje que hemos hecho en los últimos años. No tendrá la magia en las botas de Agüero, pero su carisma, la polivalencia y la calidad que atesora, hacen que sea un jugador imprescindible. Recuerdo la buena labor de Pepe Murcia la pasada temporada. Cuando teníamos a tiro clasificarnos, al menos para la UEFA, se lesionó Maxi. Todo lo que habíamos conseguido se diluyó como un azucarillo. Este año, con un equipo bastante más armado, hemos notado algo menos su ausencia.
Pero no les quepa duda, que con Maxi estaríamos luchando ahora por el título. Me recuerda mucho al añorado Simeone. Es de esos jugadores con suficientes agallas para echarse al equipo a las espaldas cuando cunde el desánimo y el desatino. Tiene además dotes técnicas y poder físico para jugar en un sitio como la banda, que no es el suyo, y redoblar esfuerzos para ubicarse entre líneas, dar el último pase e incluso ser capaz de hacer gol. Con Maxi otro gallo nos hubiera cantado. Ahora será muy difícil contar con él al cien por cien, pero su sola presencia puede ser un acicate para el resto.