La Selección alegrará su temporada
Ni buena, ni mala, sino pasable. Así ha sido la temporada NBA para los cuatro embajadores españoles. Pau Gasol ha pasado de héroe barbudo a villano traspasable en Memphis, aunque ha demostrado que la lesión no mermó un ápice su calidad. Sergio Rodríguez ha jugado poco, pero lo ha encajado con filosofía, ha adquirido experiencia y, sin duda, habrá mejorado su spanglish, aunque dudo que haya encontrado término adecuado para su vocablo favorito (chacho). Jorge Garbajosa ha sido un rookie que empezó con buen pie y acabó con mala pata. Y José Manuel Calderón ha sido el más afortunado hasta el momento, tanto en lo personal (otro escalón hacia arriba) como en lo colectivo (Toronto Raptors, campeón de División).
La mejor noticia para su retorno a casa es que, salvo Garbajosa, excluido por su lesión de tobillo, todos llegarán al Eurobasket con un curso más en su máster deportivo, y con ambición renovada. Pau y Sergio querrán ganar y disfrutar aquí lo que en el país del revólver y la hamburguesa les ha faltado. En cuanto a Calderón, algo similar: sigue siendo joven, pero ha progresado en madurez y eficacia deportiva. Puede ser un base que marque diferencias en Europa, lo mismo que Pau en la pintura. En definitiva, que nuestra joven Selección campeona del mundo puede y debe mantenerse dominadora. Sólo dos dudas para Pepu Hernández: el reemplazo de Garbajosa (Jordi Trías, Fran Vázquez o Iker Iturbe) y Raúl López sí o no, en lugar de Carlos Cabezas.