El premio gordo está aún a tiro
Aguirre tuvo un ataque de valentía en el descanso y eso cambió el partido. Decidió que el Kun donde mejor está es en el campo, algo con lo que todos estamos de acuerdo y, además, le metió por Costinha. Un gesto torero poco habitual en el entrenador mexicano. Le salió bien. El Atlético recuperó la alegría y el juego, el Kun trajo frescura y atrevimiento, Torres siguió ofreciéndose como hace siempre y el Atlético jugó los quince mejores minutos del partido. El mini festival concluyó con el gol del mejor jugador rojiblanco: el Niño. Fue un chutazo con la derecha de Torres, que le lleva a igualar con otro mito de este club, Enrique Collar, que también fue el Niño en sus tiempos, un extremo zurdo inigualable, capaz de romper la cintura con sus regates a cualquier defensa.
Torres, con sus 71 goles, ya está, por lo tanto, entre los diez mejores goleadores de la historia del Atlético. Ha alcanzado a Collar y tiene a tiro a otro grande, Adelardo, que marcó 73. El Niño Torres ahora lo que necesita es que el equipo siga creciendo y que lleguen los éxitos que faltan en su palmarés. Todo se andará, porque el plan del club es invertir para que lleguen los resultados. Así que no hay que desesperar y soportar con paciencia a equipo de Aguirre al que le sigue faltando continuidad. El Levante pudo aprovechar estas lagunas para empatar. No lo consiguió y este Atlético irregular llega a la recta final de la Liga con posibilidades de luchar por el premio gordo, que es un puesto de Champions. Y con el Niño en racha. La perla del club continúa tirando del carro. Menos mal.