El 'Becks Appeal' del Bernabéu
Sería bueno tener en mente ya, antes de que se vaya para siempre, que se le echará de menos. No porque haya sido el mejor jugador de la historia del club. Mucho menos porque haya tenido un gran regate, o por los goles que marcó. Lo que recordaremos de él es algo que tienen todos los jugadores grandes. Un estilo único. Hablo de algo puramente estético; de la imagen que se nos quedará grabada a todos los que le hemos visto jugar: el impacto de la bota de Beckham con el balón, la elegancia con que en ese momento, y justo antes y justo después, gira y perfila el cuerpo.
Yo recordaré particularmente los calentamientos antes de cada partido en la era pre Capello, cuando Beckham y Roberto Carlos se colocaban en bandas opuestas e intercambiaban quince pases seguidos. La precisión con la que Beckham ponía el balón a los pies del brasileño, la suavidad con la que le llegaba, perfecta para hacer el control, es algo cuyo recuerdo nunca me dejará de deleitar. Y además, yes, es un muy buen tipo.