La pana y la fibra milagrosa
Hace unos días fui invitado a conocer lo que me aseguraron va a ser una auténtica revolución en muy poco tiempo. Mientras un joven lleno de cables, para estudiar sus constantes vitales, se situaba en una camilla y al que veíamos en una pantalla gigante, se nos presentaba una fibra que promete ser revolucionaria y/o milagrosa. Se llama Nexus y en su fabricación interviene el platino, el aluminio y el titanio. La principal característica de esta fibra es que "emite energía fotónica en una frecuencia que le permite actuar de forma determinante sobre el agua de las células mejorando el rendimiento y la recuperación del deportista". La verdad es que la presentación de la fibra y de los pretendidos resultados obtenidos fue espectacular. Ya veremos, cuando la gente de Al Filo la pruebe en condiciones extremas si es de verdad eficaz.
Y a las mientes se me vino citar a don Hilarión de La verbena de la Paloma y su famoso "... Hoy los tiempos adelantan que es una barbaridad", al tiempo que me preguntaba qué hubieran dicho de este invento glorias de la exploración como por ejemplo John Franklin en cuyo buque con rumbo al Ártico llevaba vajilla de porcelana, cubertería de plata y una biblioteca con dos mil volúmenes (luego murieron todos sus tripulantes) o el duque de los Abruzos, un tipo que se adentró en el Karakorum en 1909 y que cada noche de cambiar el salacot y los pantalones cortos caqui por un traje para cenar. Por no hablar de su entrañable tía, la simpática reina Margarita de Italia. Las fotografías de aquella reina montañera nos retrotraen a los grabados de aquellas arrojadas damiselas que, a caballo de los siglos XVIII y XIX, se lanzaban al Mont Blanc con voluminosos vestidos, sombreros y un cayado como toda ayuda para trepar por las rampas heladas. Con pantalones de pana, gabardinas, chaquetas, bufandas y jerséis de lana se enfrentaron Mallory y sus compañeros por tres veces al Everest; con trineos y esquíes de madera y arreos de cuero para los tiros de perros Nansen o Amundsen recorrieron los Polos.
La exploración y la aventura también son viejas aliadas de la investigación de nuevos materiales que luego han pasado a nuestra vida diaria. Fibras y materiales desarrollados en la segunda guerra mundial fueron probados con éxito en las expediciones que conquistaron todos los ochomiles. De confirmarse las excelencias de la nueva fibra seguro que mejorarán nuestra vida en los territorios extremos. Pero la que seguirá siendo determinante será la fibra de la que estén hechos los aventureros.