La NBA sí es otra dimensión

¡Puff! Dos campeones del mundo en los Toronto Raptors, uno de los equipos del montón en la NBA, y su contribución apenas es decisiva para sumar la primera victoria del equipo. Parcial de Toronto contra Milwaukee sin Calderón ni Garbajosa en la cancha: 61-44; con Garbajosa: 17-21; con Calderón: 6-13; con los dos: 25-14. La selección de Estados Unidos no será campeona del mundo, pero llega la NBA y los campeones del mundo son los reservas de quienes ni siquiera fueron seleccionados para disputar el Mundial. Y es que la NBA es otra dimensión, espectáculo puro y derroche físico, una galaxia donde todo discurre a velocidad de vértigo, sin ataques estáticos, con posesiones tan cortas, que todo consiste en llegar y tirar.

Cuando uno llega, tira y falla, en la próxima jugada se lo piensa dos veces y prefiere pasar a un compañero. Malo. Se le empieza a mirar mal. Ralentiza el juego y denota cobardía. En la NBA hay que ser como Jones: falla un triple que no roza ni el aro y le da igual. Hasta que las meta o le quiten. Pues ese desparpajo le falta a Garbajosa. Tira, pero con el brazo encogido. Lo que le sucedía a Calderón la pasada temporada. Otro campeón del mundo que es reserva de un gran base, Ford, capaz de desatar un huracán en su entorno cada vez que sube el balón. En cualquier caso, Toronto ya no es el equipo inocentón de hace un año. Ha mejorado una barbaridad y en esa mejora Calderón y Garbajosa tendrán algo que ver, aunque sea desde la suplencia.