Primas en clave de conjura

Hay que reconocer cierta habilidad en los capitanes del Madrid. No era ayer un día para hacer muchas reivindicaciones después de tres años en blanco. Mantener lo de temporadas anteriores resultaba una tajada sabrosa. Incluso se podía renunciar a parte del pastel. Y así se hizo. Cobrarán prima en la Champions sólo si se plantan en semifinales, no como antes, que valía meterse en octavos. Sin embargo no renuncian al premio por ser segundos en la Liga, algo que sigue pareciendo feo. Pero cara a la galería, la venta de piña y chicos comprometidos llegó con el anuncio de que ellos mismos van a autorregularse con un código de buena conducta de obligado cumplimiento. Desconozco si esto lo han discutido con Antonio Cassano.

Incluso me cuentan que los capitanes anunciaron que van a hacer un esfuerzo para recuperar a Ronaldo. Pueden lograrlo convenciendo a Capello para que recapacite o diciéndole al jugador que se comprometa de forma inequívoca. Igual nos llevamos una sorpresa y vemos de titular el domingo ante el Celta al delantero brasileño. Ayer se dio un paso más en la idea de reafirmar el liderazgo de Raúl dentro del vestuario. Se echaba en falta desde la retirada de Hierro esa figura emblemática. Queda por saber si será suficiente para regular internamente un vestuario cuyos componentes tienen muy pocas cosas en común. Ya ven que, por una vez, el dinero de las primas fue secundario en el tradicional almuerzo.