La mejor carne del mundo
La carne argentina, como los de allá no nos dejan nunca de recordar, es la mejor del mundo. Pues Javier Mascherano, centrocampista argentino del West Ham United, fue víctima de su propia propaganda nacional el domingo en el derby londinense contra el Tottenham. El delantero Jermain Defoe estaba tan desesperado por probar el legendario bife que no pudo esperar hasta el pitido final. Ahí, en pleno partido, le pegó un mordisco a Mascherano. En la parte de arriba del brazo izquierdo. O sea, en la carne sabrosa cerca del hombro que en Argentina llaman la paleta.
Mascherano, exhibiendo otra tradicional costumbre argentina, cayó como un toro sacrificado. Pero el árbitro, curiosamente comprensivo, sólo le mostró la amarilla. Como si entendiera el impulso que condujo a Defoe a su exceso de lujuria carnívora. Defoe insistió ayer que nada que ver con la comida, o siquiera el sexo. Que la gente que lo conoce sabe que es muy juguetón, y esa fue su manera bromista de responder a una entrada dura de Mascherano.
No todo el mundo acepta la versión del delantero inglés. El ministro de Deportes, Richard Caborn, por ejemplo, ha pedido que se haga una investigación formal de lo ocurrido en el encuentro. Porque es político y sabe que a los ingleses les encantan estas cosas. Ahora lo que harán, se supone, es nombrar un juez, crear una comisión y llamar a testigos. Y si me llaman a mí, defenderé a Defoe. Diré que viví muchos años en Buenos Aires y sé lo buena que es la carne argentina. Y mi única sorpresa no es que un jugador europeo haya mordido a uno argentino, sino que no ocurra más a menudo, ¿viste?