Una decisión horrible para el fútbol
Ronaldinho ha recordado en más de una ocasión que el jugador que más problemas le ha dado en la Liga es Iraola. Y el partido empezó así, con el lateral yéndose hacia arriba como un poseso y el brasileño desbordado. Tenía buena pinta el enterrado Athletic, con Llorente y Yeste muy activos. De la conexión entre ambos llegó el voleón del zurdo a la red, que llenó La Catedral de creyentes. Y recordó a la Liga que en Bilbao también hay excelentes jugadores. La gesta estaba a tiro, pero se cruzó una decisión tan rigurosa como horrible para el fútbol, la expulsión de Casas. Ya estaban Messi y Gudjohnsen tomándoselo muy en serio, porque los leones les tenían cogidos del pecho. Sarriugarte hizo demasiado rápido el cambio por la obsesión de meter a un lateral y quitó la referencia arriba. Un tremendo fallo, perdió el desahogo en ataque.
El Athletic aguantó lo que pudo. Encajó un gol sin suerte al filo del descanso, cuando los azulgrana no habían disparado a puerta. La segunda mitad fue la crónica de una muerte anunciada, porque el campeón, además de atacar, presiona lo suyo. Xavi e Iniesta sacaron el tiralíneas y dejaron el partido donde el público esperaba antes de coger asiento. Los leones no son de Segunda, pero San Mamés no impresiona... ni a los árbitros.