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Primera fuga... ¡en la etapa diez!

Ayer llegó a Santillana la primera fuga consentida de esta Vuelta. Aunque consentida a medias, ya que cuando los fugados (entre los que se encontraban gente peligrosa como Mayo, Karpets y Paulinho) alcanzaron unas diferencias excesivas, el CSC se puso a tirar del pelotón a destajo para reducir el tiempo que habían obtenido. Que el equipo de Riis se pusiera al frente del grupo le supuso un chollo al Illes Balears, que fue a remolque porque tenía delante a Vladimir Karpets. Parece que Biarne Riis tiene la lección bien aprendida desde el pasado Tour de Francia, donde dejó marcharse a Pereiro hasta la media hora y luego a Floyd Landis recortar las distancias que le habían metido en la jornada anterior a Morzine. Ahora sabe que hay que trabajar.

Mientras, por delante, Paco Ventoso intentó ganar la etapa ante sus paisanos, pero en días como el de ayer es igual de importante la fuerza y el golpe de pedal que la fortuna. Y la fortuna estuvo de cara a Sergio Paulinho. El subcampeón olímpico había reservado energías durante toda la escapada y cuando llegó el momento decisivo supo sacar de rueda a sus rivales. Las rampitas finales quizás le hubieran favorecido a Mayo, aunque él y Ventoso aceleraron demasiado pronto y no le pudieron disputar la victoria al portugués. Para hoy, creo que vamos a disfrutar de una gran jornada. Los primeros 80 kilómetros son de gran dureza, con la Braguía y el Escudo, ambos de primera, por lo que espero una fuga que haga currar al Illes Balears.