Los socios del Madrid se han venido arriba. Me explico. La campaña electoral ha sido hasta la fecha un cúmulo de disparates, cruces dialécticos, navajeo y zancadillas que han mancillado la imagen sagrada del mejor Club del Siglo XX. Pero por el horizonte asoma la última recta de este tortuoso proceso electoral y los candidatos han optado por desvelar ya sus cartas en forma de nombres propios, o sea, cracks, galácticos, jugones...

Esto es otra cosa. Las patéticas maniobras del voto por correo, el caso Recol y las compras de votos por precios indignos (30 euros) van a dejar paso al anuncio de esos Figos que el socio reclama para decantar su voto. Actualmente hay más de un 30% de indecisos y esta gente merece saber de verdad quién vendrá de la mano de cada candidato. Vamos descubriendo las cartas de unos y otros. Ayer supimos que Villar Mir se va a tirar al monte para traerse a Cristiano Ronaldo, noticia que el compañero JJ Santos confirmó por la noche en el informativo de Antena 3. Ramón Calderón ya adelantó hace dos semanas que Mijatovic tiene apalabrados a Kaká y Robben (no olviden la foto exclusiva que AS publicó con Pedja y Abramovich en un palco privado durante el Brasil-Australia). Juan Palacios tiene a Camacho pisándole los talones a Rooney, Baldasano asegura tener a Diarra y Lorenzo Sanz bebe los vientos (Manolete dixit) por el brasileño Adriano.

El socio es sagrado y sólo pido a los candidatos que no vendan bacaladas que tengan su fecha de caducidad 24 horas después de su triunfo en las urnas. Como decía Ramón Mendoza: "Hechos y no palabras". Yo, optimista vocacional, creo en la palabra de todos. Que la cumplan...