Aguirre es aún la única certeza
He borrado ya de mi ideario esa máxima reiterativa y falaz de pensar que el próximo año es el definitivo. Son ya demasiados varapalos anímicos y no estoy por la labor. Muchas son las dudas que oscurecen el futuro en estos momentos. No sabemos si una buena parte de los jugadores de la plantilla van a ser capaces de dar el próximo año lo mejor de si mismos. Y aún voy más lejos, tengo serias dudas de si los Petrov, Kezman y compañia son capaces de demostrar que son los jugadores que nos creíamos o para ser más exactos, que nos hicieron creer. El fichaje de Rosicky finalmente no ha sido posible y hasta que no vea a Agüero de rojiblanco no me quedaré tranquilo. Por si esto fuera poco, ahora parece que se ha ido al traste la sensata idea de construir un estadio en los terrenos de Campamento, justo al lado de donde se ubicará la ciudad deportiva. De nuevo planea la sombra de La Peineta, una opción que nunca nos ha convencido, al menos como estaba planteada.
Demasiadas dudas que deben aclararse ante un futuro en el que emerge como única certeza el técnico mexicano Aguirre. Estamos ante un entrenador que inspira confianza y al que le avala una trayectoria en nuestro fútbol impecable. Conoce al dedillo la Liga española y tiene una enorme capacidad para armar un bloque compacto y tremendamente competitivo. Lo mejor, que es capaz de conseguirlo con muy pocos mimbres. Eso sí, con tiempo. El tiempo y la confianza que espero que le den.