La lesión de Maxi hundió a este Atleti

Ojalá me equivoque, pero hace tiempo perdí la esperanza de ver al equipo en Europa el próximo año. La actitud y la inspiración la perdimos en cuanto se lesionó Maxi. El argentino ha sido, de lejos, el fichaje que mejor rendimiento ha dado esta temporada. Una inoportuna lesión, cuando más en forma estaba, arruinó su temporada y de paso, la de todo el equipo. Desde que es baja, hemos echado de menos sus goles y el peligro que crea por la banda derecha. No se puede decir lo mismo del resto.

Galletti me deja indiferente. Kezman no ha demostrado ser el goleador que creíamos y Petrov, qué quieren que les diga, más vale que sentara un poco la cabeza. De Ibagaza me exaspera hasta hablar. Cada pase antológico que da, porque lo cierto es que los da, le debe salir al club por un ojo de la cara. No recuerdo un jugador tan irregular y endeble. Así que, entre tanto despropósito, solo nos queda aferrarnos al que casi nunca falla. Ya saben de quién hablo. Recibe más patadas que nadie y ahí está, dando la cara siempre, para que habitualmente se la partan. Como atlético, ahora que vuelve, sólo me queda darle las gracias. Es el único que me recuerda que un día fuimos verdaderamente grandes.