Un partido bonito y perfecto

Un partido bonito y perfecto

Me gustó el partido. Me agradó el Real Zaragoza, pero me encantó el Espanyol. Fue increíble el planteamiento de Miguel Ángel Lotina, que se vio reforzado con el tanto inicial de Raúl Tamudo. Eso pudo romper el partido. Además, cuando empataron los aragoneses, la suerte volvió a estar del lado perico, puesto que Luis García hizo un golazo entre seis rivales. Sensacional, pero el cuerpo de uno no estaba del todo tranquilo.

La suerte que le ha faltado al equipo blanquiazul en el campeonato doméstico la tuvo ayer. Todo lo que tiró fue dentro de la portería del Zaragoza o al palo de su portería. La Copa ya está en casa. Es la cuarta de la historia y la segunda en seis años. Y eso quiere decir algo. Las cosas parecen que no han ido del todo bien en la dirección de la entidad, pero ahora lo que no se puede hacer es cometer los errores del pasado y tratar de dar continuidad al proyecto. ¿Cómo? Inviertiendo bien y sacando provecho de la cantera. El ejemplo más claro, los goleadores de ayer: Luis García costó su pasta el pasado verano, pero ya está amortizada; lo de Tamudo, no tiene precio y la habilidad de Ferran Corominas ayer fue impagable.