¿Alguien pone remedio?

El arbitraje en general está pasando por malos momentos, pero como es habitual, el estamento arbitral hunde su cabeza en la tierra y no toma medidas. Pero no toda la culpa se la achaco a este organismo hermético, también le doy un grado importante de responsabilidad a la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE). En su creación fue reivindicativa, pero con el correr de los tiempos veo mas el afán recaudatorio y el mantenerse en la poltrona de su presidente, Gerardo Movilla, que tratar de dar soluciones, porque la responsabilidad de arreglar los problemas del fútbol es principalmente de los que generan este espectáculo. Por qué no se plantea ante la Federación Española la posibilidad que los futbolistas realicen cursos específicos de arbitraje con todo lo que ello conlleva: teoría, práctica, psicología, etc., y prepararlos para, una vez finalizada su etapa como jugador, puedan tener la opción de seguir su carrera profesional como árbitro.

Seguramente, no todos los peloteros puedan ser buenos árbitros, pero los que pasen los respectivos exámenes estarán mas cualificados que aquellos individuos que no han vivido ni han sentido como se manifiestan los deportistas en momentos determinados, cuando se está a 180 pulsaciones o más. Tampoco van a tener ese ansia de protagonismo que tienen algunos colegiados, queriendo ser protagonistas de esta historia, cuando la mejor nota de un árbitro se la lleva cuando ha pasado desapercibido.