Esta mañana tenemos a Emilio Sánchez Vicario en el Foro Ferrándiz-AS a una semana vista de la eliminatoria contra Bielorrusia en la Copa Davis. Vicario se estrena como capitán en una eliminatoria complicadísima. No es que Bielorrusia sea una potencia, pero jugando en casa, sí, porque Mirnyi nunca pierde allí. En Bielorrusia han caído la Argentina de sus pujantes tenistas, la Rusia de Safin y la Alemania de Kiefer. Como siempre cuenta con los dos puntos de Mirnyi, en cuanto gana el doble ya pasa la eliminatoria. Son las cosas de la Davis. La ventaja de jugar en casa es tremenda. Y la de tener un doble especializado, también. Justo lo que nos falta a nosotros. Pues el nuevo capitán, como gran doblista que fue, lo debe remediar.

Tenemos la suerte de que Vicario conoce mejor que nadie la importancia del doble. Fue número uno del mundo y ganó 50 torneos ATP, casi todos con Sergio Casal de pareja, además de disputar otras 29 finales. Como jugador individual fue bueno, pero no destacó tanto: 15 victorias. En la Davis también logró un mayor porcentaje de victorias en dobles que en individual. Tiene, pues, la experiencia y los argumentos necesarios para hacer entender a sus jugadores de que no hay que menospreciar el doble. Medios para incentivar a una pareja va a encontrar a través de becas especiales y jugadores salen cada año a decenas. Sólo tiene que convencerlos. Él parece la persona indicado para ello. En sus manos habría muchas Davis.